domingo, abril 14, 2013

Se nos ha muerto Chiara

Este no es un blog literario, ni pretendo que lo sea.
Pero hoy voy a comentar un poco sobre el libro que acabo de terminar de leer, "Vaticano 2035" de Monseñor Pietro De Paoli (seudónimo de un importante personaje de la curia).
 
"Vaticano 2035" relata la vida de Guiseppe Lombardi, quien llegará a ser conocido como el Papa Tomás I.  Durante el año mencionado, 2035, Tomás ocupará la silla de Pedro.
 
El argumento de la historia gira en torno a la vida y los tiempos de esa época: conspiraciones vaticanas, duelo entre sectores reformistas y conservadores, fundamentalismo religioso, celibato del clero, papel de la mujer en la Iglesia y unión de las Iglesias cristianas por un lado, y por el otro, pandemias, nuevo orden mundial, paz en Oriente Próximo.  Son razones que pueden hacer peligrar la vida de un pontífice revolucionario decidido a romper con tradiciones seculares (transcribo de la contraportada).
 
Simplemente diré que es una magnífica historia y que aquellos que disfruten de leer contenidos religiosos o políticos, la encontrarán interesante.
 
"Vaticano 2035" es una novela polémica, donde la visión de sus protagonistas los lleva a enfrentar los grandes retos que tiene la iglesia como institución: la disminución de la feligresía, la sexualidad, la homosexualidad, la ordenación de sacerdotes casados, la valorización del papel de la mujer en la sociedad y la iglesia, etc.
 
Hace un tiempo me asumí no creyente y abandoné las (pocas) prácticas religiosas en las que participaba de forma ocasional.  La iglesia me parecía el casco abandonado de un barco, que no va a ninguna parte. Una (mi) realidad, semejante a la que refleja en algunas páginas este libro.
 
Pero lo mejor de la novela, es que es una historia muy humana.  Es una historia que te mueve, que toca los sentimientos, que te arranca lágrimas.
 
Copio un fragmento del libro, de donde tomo el título de esta entrada.
 
SIMON CERVIN: Me llamó Morro.  Recuerdo que dijo aquella extraña frase, "Se nos ha muerto Chiara", como si aquella joven fuera una parte de nosotros.  Y yo, que la había visto tres veces, solo tres veces, en total unas cuantas horas, sentí, te juro que sentí que "se nos" había muerto.  Como lo sientes por uno de tus propios hijos... Algo se apaga en tu interior"
 
Chiara Sassetta, después Chiara Lombardi, es la esposa de Giuseppe.  Este hombre, casado y con dos hijas pequeñas, es ordenado diácono unos meses antes de la muerte de su mujer y seguirá su carrera eclesiástica hasta alcanzar el peldaño más alto de la jerarquía católica. 
 
Giuseppe, como Tomás I, enfrenta el mundo, enfrenta la tradición, promueve reformas, se reconoce humano, vive, vibra.  Un personaje como el que se necesitaría ahora frente a esta institución religiosa.
 
Se nos ha muerto Chiara.  Se nos ha muerto Giuseppe.  Ojalá también muera la iglesia tal como está en estos días, decrépita, acartonada, rígida. Ojalá, para aquellos que creen en ella, renazca una institución renovada, abierta, integradora, tolerante, coherente, una iglesia que realmente promueva la paz, el amor y la unidad.
 
 
** Vaticano 2035, Monseñor Pietro De Paoli.  Editorial Grijalbo, 2006.