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lunes, junio 16, 2014

Miss you, Daddy



Papa, can you hear me?
Papa, can you see me?
Papa, can you find me in the night?

Papa, are you near me?
Papa, can you hear me?
Papa, can you help me not be frightened?


Ayer, Día del Padre, hoy, siempre... 
Te extraño tanto, papá.

viernes, diciembre 13, 2013

Dueles


Siempre.
Pero sobre todo, hoy.
Por lo de anoche.
Por las imposibilidades.
Por todo.
La pregunta no es ¿por qué?
La pregunta es: ¿hasta cuándo?

domingo, septiembre 22, 2013

Te extraño, papá

A veces me pregunto si allá donde estés sigues siendo como eras: brillante, incisivo, determinado, peleonero, con ese tan particular sentido del humor, enamorado de la música y los libros...
Hoy hace un año que te fuiste.
Mañana sería tu cumpleaños.
Estás aquí aunque ya no estás.
Te extraño, papá.
 

domingo, septiembre 23, 2012

El Otoño, Vivaldi


 
Just a memory.
Just for you.
Just, because of you.

jueves, noviembre 18, 2010

Nostalgia

Extraño mi casa.
Añoro esas largas conversaciones hasta altas horas de la madrugada en el futón del living.
Extraño el calor de Sirio acostado sobre mis pies.
Las risas que asomaban con frecuencia.
Cierto cariños especiales.
Andar incansablemente, detenerme frente a los escaparates, curiosear en las librerías...
La belleza del Cementerio Recoleta.
San Telmo y Mafalda.
La paz del jardín japonés.
Las calles de enormes árboles.
La bulliciosa Avenida Rivadavia, cuyo nombre tanto me costó aprender.
Extraño mi casa.
Extraño Buenos Aires.
Quiero volver.
Mi alma necesita regresar a donde pertenece.

lunes, agosto 09, 2010

Un año de tu partida

Hoy hace un año que te fuiste.
Poco tiempo, pero a ratos parece una eternidad.
No, aún no termino de asimilar todo lo que pasaste.
Aún no entiendo el por qué de tanto dolor, de tantas tragedias.
Sólo sé que estás en un lugar mejor.
Sólo sé que ahora estás en paz.
Que eres feliz.
Eso me es suficiente.
Vives en mí, en mis recuerdos, en mi corazón.
I miss you Juli.

martes, febrero 02, 2010

Recordándote en tu cumpleaños

Hace un año había motivo para festejar.
Pienso en aquella celebración en la que dijiste que sólo faltaba yo para que fuera una noche perfecta.
Un año hace en que aún había esperanzas, en que creía en los milagros.
Hace un año, esperaba que pudieras recuperarte.
Hoy cumplirías años.
Pienso en ti.
Si cierro los ojos y te imagino cerca, quizá pueda abrazarte.
Ojalá estuvieras aquí para festejar juntas.
Pero tengo la esperanza de que, donde quiera que estés, estarás mejor que en este mundo.
Recuerdo tu cumpleaños y celebro la suerte de haberte conocido.
Te extraño Julieta.

sábado, septiembre 05, 2009

Adiós Feli


Después de un mes en el hospital, tu cuerpo decidió que era suficiente.
Siempre hay un principio y un final, eso lo sé perfectamente, sólo que me pregunto si la ineptitud humana fue causante de una partida adelantada.
Un diagnóstico equivocado, la rectificación tardía. ¿Las cosas hubieran sido diferentes si desde un principio te hubieran hecho la prueba? Nunca lo sabremos.
Se queda en mis oídos tu risa espontánea, tus frases cargadas de ironía, tu sentido del humor, tu pasión por la diversión, tu siempre estar para otros.
Fuiste humano, inmesamente humano. Eso fue lo mejor de ti.
Te echaremos de menos Feli. Mucho.
Descansa en paz.

domingo, agosto 09, 2009

Blog de luto


La lluvia de hoy es diferente a la lluvia de otros días.
Hoy el cielo llora conmigo tu partida.
Nada puede decirse, ¿lo esperaba? Sí, en cierto sentido sí. Pero de todas maneras duele lo mismo, o quizá más.
Ese saber que no te veré en mi próximo viaje, ese que planeaba con tantas ilusiones y en el que verte era uno de los ojetivos.
Es darse cuenta que nunca más habrá en mi correo un mensaje tuyo, que ya no aparecerás repentinamente en el messenger.
Yo sé lo que pasaste los últimos meses, sé del dolor, del sufrimiento, de la lucha del día a día...
Sé de las ganas que tenías de vivir, del ánimo, de aquellos detalles que te dieron esperanzas...
Pero también sé que hay cosas que tienen límites, lo sé perfectamente.
Pienso en ti, robándome la frase de una canción: "a ti mi guerrera invencible, a ti luchadora incansable, a ti mi amiga constante de todas las horas..."
Esa es la imagen con que me quedo de ti.
Es tu ejemplo el que vivirá en mi alma cada día.
No mueres mientras vivas en quienes te queremos.
Te recordaré siempre.
Adiós Julieta, deseo que por fin encuentres la paz que tanto buscaste en este mundo.

lunes, diciembre 15, 2008

Momentos de...

Quisiera escribirme una carta a mí misma diciéndome que todo irá bien, que pronto me sentiré mejor, que las lágrimas se secarán... pero, ¿de qué serviría? No me lo creo, no ahora.
Después de todo, quizá sea aún tiempo de pensar, de ver para atrás, de asumir las ausencias, de aprender a despedirme, de permitirme llorar y con ello ir cerrando círculos que he dejado abiertos a lo largo del tiempo.
Tiempo de descubrirme a mí misma, de aprender a ver qué quiero, qué necesito, de empezar a andar en esa nueva línea.
Momento de abrir viejos recuerdos, de tirar lo que no sirve, de dejar lugar para las nuevas experiencias, para un mejor devenir.
Quizá ahora es tiempo de reconocer que no siempre puedo tener a la gente que quiero cerca, y que tampoco puedo estar siempre cerca de los que quiero. Aunque eso duela algunas veces. La distancia es a veces necesaria, provechosa.
Una oportunida de asumir que no soy omnipotente, que simplemente soy humana, que soy tan vulnerable como cualquiera y que eso me acerca a la gente. Momento de aprender que las lágrimas no me desharán, que esa sal irá cicatrizando mis heridas de una vez por todas.
Tiempo de vivir los duelos, las pequeñas rupturas, los cambios. Tiempo de despedidas. Tiempo de aprender que la historia no tiene que repetirse. Momento de enfrentar a los temores y darle a la gente la oportunidad de ser ella misma, de no meterla en modelos prefabricados que posiblemente sólo estén en mi cabeza.
Momento de asumir que no hay dioses sino humanos. Momento de dar valor a las necesidades y sentimientos de los que quiero.
Tiempo de dejar que las cosas fluyan, que ocurran sin intentar controlarlas. Tiempo de sentir, de ser, de disfrutar de las tristezas, de respetar mis propios procesos.
Tiempo de tantas cosas. Tiempo para mí, para ser yo, para crecer a través de tiempos difíciles.

jueves, noviembre 27, 2008

Lo siento muchísimo, Dani.



Mi querida Dani:

Sólo el silencio puede decir todo eso que mis palabras no saben expresar.


Sólo un abrazo te haría sentir la calidez y protección que desearía transmitirte.


Sólo mi mano sosteniendo la tuya te mostraría que no voy a dejarte caer.


¿Cómo decirte que tu dolor es el mío? ¿Qué tus lágrimas son las mismas que caen de mis ojos? ¿Qué comparto la ausencia y el vacío?


Medio continente de distancia no será suficiente para que yo esté lejos de ti en estos momentos. Sé que nada de lo que diga o haga podrá consolarte. Pero de todos modos estaré ahí, para ti, para lo que pueda brindarte.


Dani, mi niña, no sabes cuánto lo lamento. Recibe el más fuerte y largo abrazo. Sabe que cuentas conmigo para todo. Sabe que mi corazón está a tu lado.





Gracias Andy por todo lo que dejaste en nosotros.
Que el amor, la luz y la felicidad te rodeen.
Jamás te olvidaremos.