sábado, febrero 23, 2008

Ayer, hoy y siempre

Qué fortuna es que algunas cosas, a pesar del tiempo sigan siendo las mismas. Al menos, para mí, después de una semana de interrogantes, de respuestas y pequeños enfrentamientos conmigo misma, fue un alivio darme cuenta de la constancia de algunas situaciones.
Sí, lo sé, me paso de maldita algunas veces, con algunas personas, y no es pretexto pero cuando se te ofrecen como servidas en charola de plata, ¿quién desaprovecha la oportunidad? Al menos yo no.
Y resurgen las anécdotas de los tiempos de la universidad, de los maestros, lo que sigue igual... ¡Bendita cotidianeidad! Hay cosas que nunca cambian, que siguen dando cobijo, seguridad, continuidad. Y redescubrirlo fue bueno para mí.
El río fluye, pero sigue corriendo en su mismo cause, gracias a Dios.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Una opinion,si bien el aporte de Roma es infinitamente importante para la humanidad fundamentalmente en la Arquitecura, ciencia, medicina y otras ciencias humanas, es muy criticable varios aspectos de su cultura y la idiosincracia de esta antigua sociedad.
Roma fue la potencia antigua mas esclavista de todos los tiempos. Ademas de las conquistas militares es sabido que la gran potencia que fue Roma en la antiguedad se debio en gran parte gracias al uso del latigo... Es decir, es imposible obviar que los esclavos en Roma eran tratados como cosas,en el mayor de los casos,eran azotados a menudo para castigar hasta las menores faltas y muchas veces tambien como entretenimiento de sus amos. Sin dudas los esclavos rurales ligaban la peor suerte, sometidos a jornadas de trabajos extenuantes, con escasas vestimentas y comidas y hasta eran atados a molinos de trigo para moler el grano, haciendo el trabajo de una mula. La misma suerte corrian los que trabajaban en las canteras. Y como si fuera poco esto los esclavos de guerra eran utilizados como gladiadores en la arena ,amen de ser enviados a galeras donde debian remar como desgraciados a ritmo de tambor y latigo.
Como sociedad eran despreciables, ambiciosos, y sin escrupulos...

Es una opinion, me gustaria que me des tu punto de vista,por lo visto es una ciudad y civilizacion que a ti te fascina.

saludos

Patty Rodríguez dijo...

Agradezco tu comentario.
Creo que hay dos puntos a considerar en tu mensaje, el de la esclavitud y el de mi opinión sobre Roma como tal.

No soy experta en el tema de la esclavitud, pero sé que lo que dices es cierto. Sin embargo no es la única civilización que se ha valido de este medio para conseguir sus objetivos, tenemos por ejemplo a los egipcios y a los colonizadores del continente americano, que no se caracterizaron precisamente por su benevolencia hacia los esclavos.
Si bien la esclavitud no es algo que yo aplauda, si creo que es importante contextualizar. Para nosotros hoy en día la práctica es aborrecible, sin embargo para la mentalidad de esos tiempos era muy natural, el mismo Aristóteles lo comentó. Conforme la civilización avanza cambian también sus puntos de vista, intereses, prioridades. Así como para nosotros prácticas antiguas son reprobables, supongo que llegará un día en que otras personas se admirarán/escandalizarán de lo que para nosotros hoy es muy natural.
¿Qué tan lejos estamos hoy de esas prácticas? A veces me parece que no mucho. Cambia la manera de esclavizar, pero hay gente que sigue atada a una ideología, a un propósito, a una empresa, que igual que antaño se vale de los mortales para conseguir sus fines, que no les pide opinión, que retribuye cómo desea (sin que muchas veces sea equitativo) y si bien, no hay latigos ni tortura física, sí puede existir daño moral, psíquico, estrés...
Tal vez esto suene un tanto radical, pero es lo que me ha tocado ver.

Dices que los romanos son una sociedad despreciable, ambiciosa y sin escrúpulos. No creo que haya habido grandes variaciones en eso a lo largo del tiempo en algunas sociedades, conozco una que tus palabras describen muy acertadamente.
Creo que se necesita una buena dosis de sangre fría, de neuronas, de estrategias, ambición y deseos de ganar para ir más allá de donde se está, hablando en un contexto de grandes imperios. Tus calificativos podríamos aplicarlos, por ejemplo, a los mexicas, que tenían sometido a buena parte del territorio mesoamericano, los mongoles en su conquista del territorio asiático... No veo gran diferencia con los romanos.

Si bien, yo reconozco que no todas las prácticas de los romanos eran dignas de alabanzas, creo que no puedo quedarme únicamente con la visión del punto negativo. Como bien dices, han hecho grandes aportaciones a la ciencia, la medicina, al desarrollo urbano, a la política, la lengua, la arquitectura y muchas áreas más.

Creo que me quedo con el pastel entero, con todo lo que Roma fue/es/será, aceptando las limitaciones y aplaudiendo sus aciertos. No tomo sólo la cereza que corona la parte central.

Anónimo dijo...

Hola Pat, he llegado a tu sitio por blogger ya que me llamo la atencion el titulo de tu blog, soy historiadora y otra amante de roma como vos...

Bien, he leido el comentario o la vision con respecto a Roma que ha dejado la otra persona y mi opinion concuerda con la tuya, eran otros tiempos y al menos ese tipo de exclavitud no se practica mas, claro, que sigue existiendo en algunos paises la explotacion, pero no concuerdo con lo de DESPRECIABLES... Cada uno vive de acuerdo a su tiempo y sin dudas Roma a influido y mucho y es uno de los pilares de nuestra civilizacion actual, desde el codigo de leyes, pasando por arquitectura y varias ciencias mas, esto por un lado...

Con respecto a la esclavitud propiamente dicha: Es innegable que hubo esclavos en Roma, y muchos... Si bien el amo o ama podia castigarlos si lo deseara ya que no habia ley que le prohiba hacerlo, que yo sepa, eso es relativo...

Dependia del valor del esclavo y del uso que este tenia. O sea, un esclavo de labores agricolas o los condenados a las galeras sufrian mas latigazos que un esclavo de casa, y ello por no ser personas, sino por ser equivalentes a las vacas, caballos o burros. Eran animales ante los ojos de los dueños. Los de casa, en cambio, por su educación, eran vistos mas como sirvientes, por lo cual salvo en una situación extrema, o a menos que fuera Caton que era un bestia, no se usaba a menudo el latigo, sobre todo porque el precio del esclavo de casa era considerable y es lo mismo que te compres una television de plasma y le des de golpes cuando la señal falla.

Otra cosa es que busque una explicación a por qué existian los esclavos. Eso es harina de otro costal.

Patty Rodríguez dijo...

Bienvenida Mabana, gracias por comentar.
No soy experta como tú en el tema de Roma, pero es una civilización que me encanta. Tu profesión es la que yo hubiese deseado tener, pero por diversas situaciones me encaminé a otros lados.

Contextualizar es algo que he aprendido a aplicar con más vigor en los últimos años por ser uno de los pasos del paradigma de educación que manejamos en el colegio. Esto me ha abierto los ojos a muchas cosas. Y me ha ayudado también a no engancharme con cosas que no son de la misma manera en otros ambientes.

No pretendo hacer de este un espacio didáctico o histórico de Roma, es más bien una bitácora de viaje, donde voy hilando poco a poco lo que vivo con lo que soy. Como dice la entrada de este blog, en cierta forma yo soy Roma, compleja, con una mezcla de antigüedad y modernidad, cristiandad y paganismo, de todos aquellos que la hacen ser lo que es, destruida y reedificada a través de sus mismas piedras...

Al leer tu post descubrí que en mi respuesta a Romanos borré sin darme cuenta (supongo que cuando hice correcciones) que a mí tampoco me parece despreciable el Imperio Romano. Gracias por recordármelo para aclararlo. Como decía, no todo lo que ocurrió en esa época es digno de aplauso, pero no es merecido un adjetivo tan duro y despectivo.

Gracias por pasar por aquí.